Desde que el Partido Comunista Chino llegó al poder en Pekín en 1949, la población de China solo había experimentado una vez un déficit de nacimientos sobre defunciones. Esto ocurría en 1961, cuando la política colectivista llamada del « Gran Salto Adelante » había provocado una disminución considerable de la producción de alimentos, con el consiguiente aumento de las muertes y una disminución de los nacimientos. Pero, desde 2022, China parece estar ahora en un proceso de despoblación. ¿Por qué ?1. La llamada política de hijo único, aplicada con gran rigidez administrativa de 1979 a 2015, ignorando los procesos demográficos y sin una visión a largo plazo, parece haber impregnado las mentalidades de las jóvenes generaciones, especialmente las mujeres jóvenes. Con la entrada en vigor en 2016 de la ley en favor de « dos hijos » y la incitación a los « tres hijos » desde 2021, el poder intenta ahora fomentar la maternidad. La política de hijo único ha resultado vana hasta ahora porque ha llevado a los padres a invertir demasiado en la educación de su único hijo. Esta costosa inversión, que tiene como objetivo preparar a su hijo para la competencia académica y profesional a la que se enfrentará, no les permite tener en cuenta hijos adicionales por los que no podrían hacer la misma inversión. Además, sobre todo en las zonas urbanas, las mujeres se casan cada vez más tarde, lo que, en un país donde el porcentaje de nacimientos fuera del matrimonio es bajo, retrasa posibles nacimientos y de hecho reduce el número potencial de hermanos, dado que la fertilidad disminuye con la edad…